martes, 29 de agosto de 2017

Paisajes de playa

Para terminar con el tema del mes de Agosto, que nos da unas breves vacaciones de invierno en el Hemisferio Sur, pero unas largas vacaciones de verano en el Hemisferio Norte, escojo a un gran pintor inglés del Romanticismo. Y no, no es Turner.

Cuando pienso en vacaciones, suelo pensar en playa. No importa si son vacaciones de verano, de invierno, intermedias... La playa me parece el lugar perfecto para no hacer nada –teniendo en cuenta que para mí, no hacer nada equivale a tenderse en la arena con un buen libro o una buena máquina de fotos– y disfrutar del descanso. O ser feliz en medio del mar, jugando con las olas. Por su juego, o por su calma, la playa es mi lugar de elección para vacacionar.

¿Y quién mas que Constable (1776-1837) para evocar sensaciones calmas en un paisaje? De todas los bocetos en óleo que hizo de la playa de Brighton, me gusta mucho éste porque muestra a las personas tranquilas, sentadas o caminando, con sombrillas, en un día de verano bastante más al norte del Trópico de Cáncer.

John Constable. Brighton Beach, 22 de Agosto de 1824.
Victoria&Albert Museum, London.
From: Wikiart, https://www.wikiart.org/en/john-constable/brighton-beach
Siempre he sentido que la orilla del mar tiene un encanto especial. Y la pintura de Constable me hace volver los pensamientos a la playa, a todas las playas visitadas... a tomar baño en el mar en un día de verano, a correr en la arena en un día de sol pero de invierno, sintiendo el calor del sol y el frío del ambiente al mismo tiempo en el rostro. Es interesante mencionar que para Constable, Brighton no tenía nada de especial, según dice una carta que envía a Fisher el 29 de Agosto de 1824:
"En resumen, no hay nada aquí para un pintor, sino las rompientes y el cielo, que han sido realmente encantadores y siempre variados. Los barcos pesqueros son pintorescos, pero no tanto como los barcos de Hasting que son 'luggers' ... Pero estos temas están tan trillados en la Exposición, y son en realidad tan poco capaces de ese bello sentimiento que el paisaje es capaz o que más bien pertenece al paisaje, que han hecho mucho daño al arte -forman una clase de arte mucho más fácil que el paisaje y en consecuencia lo han suplantado casi ..." (1)
Me impresiona mucho como un pequeño boceto romántico –mide más o menos 16.5 cm por 30.4 cm– puede expresar tanto en tan poco espacio y con trazos tan sencillos pero tan completos. Se ven parejas, grupos, barcos de pesca en el fondo. Muestra con destreza la luz brillante del sol y las sombras que genera. Y me impresiona aún más, porque él no estaba especialmente entusiasmado por este paisaje, pero aún así, capta su belleza tranquila y transmite calma.

Es que Constanble, el renovador del paisajismo inglés, es el pintor que captura la luz, es el que muestra su vivencia, y que con su obra evoca lugares, memorias y luces. Pero a diferencia de Turner, que muestra el poder terrible de la naturaleza, Constable nos habla de la paz de esa naturaleza.

Y a través de una forma distinta de expresarlo, Mário Cesariny (1923-2006) también transmite esa sensación de calma con su "Linha d'Água". Cesariny fue poeta y pintor, y fue uno de los más importantes representantes del Surrealismo en Portugal.

Mário Cesariny. Linha d'Água.
Óleo sobre madera, que mide 2531cm por 1148cm
Colecção MAC (Movimento Arte Contemporânea)
From Wikiart. https://www.wikiart.org/en/mario-cesariny/linha-d-gua
Con tan solo unos trazos, esta imagen (más grandes que otras con el mismo nombre y del mismo autor) representa para mí, una ola vista desde la orilla. Una de esas rompientes encantadoras y variadas que mencionaba Constable en su carta. Sencilla pero intensa, como llamando al espectador a lanzarse de lleno a la ola. 

Foto propia. Praia da Almagreira, Portugal. 2016.
¡Que vivan las vacaciones! !Que viva la playa e il dolce far niente!


Referencias.

(1) Texto tomado de Brighton Beach | John Constable
https://collections.vam.ac.uk/item/O126127/brighton-beach-oil-painting-john-constable/ (Traducción libre).



viernes, 25 de agosto de 2017

El Placer de Vivir en el siglo XVI

Peasant Wedding

Wikipedia 1280x 829
1568





The Harvesters
Wikipedia 1280 x 932
1565

El tema de este mes es el ocio, o il dolce far niente, como dirían los italianos. He pensado mucho en cómo el arte puede relacionarse al ocio. Marissa, Cristina y Liz lo han hecho muy bien y espero ahora estar a su altura.

Yo he elegido remontarme en el tiempo y hablar de Pieter Brueghel the Elder (c. 1525/30-1569) un pintor flamenco del siglo XVI.
Conocido por sus pinturas de escenas cotidianas en un mundo que si bien está orientado al Renacimiento y todo el despertar del mundo clásico, Brueghel parece haber elegido quedarse en la Edad Media.
La mayor parte de sus pinturas son sobre la vida campesina en una época  en la  que la Reforma de Lutero ha causado una escisión muy profunda en el mundo compacto del catolicismo.

La Cosecha que representa el mes de Agosto en un ciclo de cuadros de meses del año, de 1565 y Boda Campesina de 1568, un año antes de su muerte de alguna manera  se relacionan. Ambos recrean un mundo medieval, campesino que revela que la gente de aquel entonces también sabe divertirse y relajarse. Boda Campesina es un cuadro que ha sido tomado incluso por la Coca Cola como referente del placer, del disfrutar de la vida, olvidándose temporalmente de la dura faena de campo para descansar y pasarla bien.
Para mí, al margen de ser un cuadro que evoca lo que sería Le Bonheur  de Vivre, como llamó Matisse a su cuadro  (1905-1906), tiene muchas reminiscencias personales.

Este cuadro fue mi compañero mucho tiempo en mi mini estudio en el dorm donde viví mientras estudiaba en NYU. Tenía el afiche frente a la cama y lo miraba todos los días y siempre me preguntaba, qué comerían, como sería la vida en ese tiempo, qué música estarían tocando, cómo se divertirían, qué bailarían.  Es una imagen que recrea el placer y me intriga más porque Pieter Brueghel the Elder era capaz también de hacer cuadros aterradores y visionarios, en los que revela abiertamente la profunda  huella que uno de los pintores más trascendentes de todos los tiempos, Heronymus Bosch (El Bosco)
(C. 1450-1526) ha dejado en él.

Cuadros como La Torre de Babel (1563) o Los Proverbios Flamencos (1559) entre otros, revelan que también puede ser, como El Bosco, un pintor visionario,  en un mundo de cambios, herejía, alquimia, fe, moral y como aglutinante de todo, la religión.  Y ese pintor visionario también sabe recrear la vida cotidiana, tanto así que lo consideraban un campesino, cuando no lo era. Y su mensaje queda claro, en el mundo en que a él le tocó vivir, en una sociedad tan estratificada, el pobre y el rico tienen derecho a divertirse, a distraerse y a olvidarse y dejar atrás la angustia, las preocupaciones, para gozar también de lo bueno que da la vida. 

También es un cuadro que me llena de nostalgia. Uno de los profesores más brillantes que tuve en NYU, decía que la nostalgia era como una esperanza al revés, proyectada hacia el pasado. Y este cuadro está lleno de nostalgia. Para este profesor, tuve que hacer un trabajo sobre El Bosco, de profunda investigación, ubicar en Microfilm  un texto del siglo XV, pelear por sacarme A. Y, como siempre, cuando se trata de Europa, me recuerda a mis padres, con quienes fui por primera vez al Kunsthistorisches Museum de Viena dodne vive este cuadro y me quedé sorprendida de la cantidad de Brueghels y Boscos que tenían.  Creo que dada la cercanía a Amberes, era natural.

Termino con un epigrama  de Fernández de Moratín (1737-1780) que siempre me recitaba  mi padre, y vuelve la nostalgia de su ausencia:

Admiróse un portugués
de ver que en su tierna infancia
todos los niños en Francia
supiesen hablar francés.
«Arte diabólica es»,
dijo, torciendo el mostacho,
«que para hablar en gabacho
un 
fidalgo en Portugal
llega a viejo y lo habla mal;
y aquí lo parla un muchacho».


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